Quiero ser historia.

Adelante, solo mueren de amor los pusilánimes, los que no entienden que el precio del placer es el dolor, los que no saben que el dolor de hoy será el chiste del mañana. Los egoístas que quieren todo a cambio de nada. Yo no me muero de amor, ni de dolor, ni de ausencia, yo no lloro, yo me saco los clavos sin anestesia, alguien me dice que estoy loco, que tengo una obsesión con lo imposible, puede que sea así, pero: ¿sin pena ni gloria?, no me gustan las cosas fáciles, soy un masoquista de mierda, me aburren los amores simples donde no quedan marcas, soy un intenso, mi sangre hierve todo el tiempo, nada me hace muy feliz, solo me siento vivo untándome con la vida de otra persona, entonces viene la pena, el dolor de lo perdido, de los amores imposibles, de las balas rasantes que nunca dan en el blanco, ese dulce sabor de los días negros. Pero queda el recuerdo, la inscripción de una vida en mi vida, el valor del deseo consumado, solo se extraña lo que se ha disfrutado, quedan cosas que contar, y cosas por las cuales reír o llorar no importa. Lo importante es dejar huella, lo importante es permitir que el libro de la vida tenga más historias que contar, que este lleno de personajes fascinantes, de mujeres bellas, de noches de luna, de guerras, de nacimientos y muertes, mi vida es un libro abierto y le quedan paginas en blanco, quiero que se escriban en tinta, quiero mucho sentimiento, quiero poder releer mis hojas y encontrarme con ella, no quiero historias rosa, quiero sexo y violencia, quiero un libro para pensar, no quiero ser un manual, quiero ser una historia.